Gato Siamés, Características de la Raza – ⏰ Tiempo de lectura de 5 a 7 Minutos

El siamés, una de las razas de gatos más conocidas, es curioso, inteligente, hablador y exigente. Si quiere un gato que converse con usted todo el día, el siamés puede ser su pareja perfecta. El siamés pesa entre 2,5 y 3 kilos y tiene un pelaje característico con zonas oscuras sobre un fondo claro (color point).

El siamés es una de las razas de gatos más antiguas y conocidas. Este bello gato de color claro con llamativos puntos de color en seal, lila, chocolate y azul hizo su debut en el hemisferio occidental en la Inglaterra victoriana, donde fue promocionado como el gato real de Siam, lo que ahora llamamos Tailandia. Desde entonces ha sido muy querido por la gente que aprecia su buen aspecto y su talento vocal.

El siamés se presenta en dos tipos: de exposición y tradicional. El siamés de exposición es una obra de arte moderna, todo líneas y ángulos. Tiene un cuerpo tubular sobre patas largas, una cabeza en forma de cuña con orejas grandes y triangulares y una cola larga. El siamés tradicional tiene la cabeza redondeada y el cuerpo fornido. Ambos tipos tienen ojos azules brillantes que exigen la adoración debida a todos los gatos. Tanto si elige un siamés de exposición como un siamés tradicional, compartirán la misma maravillosa personalidad.

Los siameses son infinitamente curiosos, pero tienden a ser inteligentes y exigentes. Si quiere un siamés sólo por su aspecto, piénselo de nuevo. Este es un gato que siente pasión por su gente y se involucrará en todo lo que hagan. Cuando no están cerca, se entretendrá abriendo grifos, abriendo armarios, buscando nuevos escondites para frustrar a quien pueda estar buscándolo y viendo la televisión con claro interés. Incluso puede estar dispuesto a pasear con correa y a jugar a la buscar objetos con el mismo entusiasmo que otro animal de cuatro patas con el que desprecia ser comparado.

El siamés puede ser más famoso (o infame) por su voz que por su aspecto. Te «hablará» durante todo el día y hasta bien entrada la noche, expresando su opinión sobre lo que le das de comer, lo que haces, la mucha (o poca) atención que le prestas y lo que hace el perro de al lado. Si aprecias su aspecto escultural y no te importa que a veces «hable mal», puede ser el gato ideal para ti.

Otros datos curiosos:

• El siamés es muy bueno para aprender trucos y aún mejor para entrenar a su gente a hacer lo que él quiere.
• El siamés tiene un característico pelaje «punteado»: un fondo de color claro con puntos más oscuros en las orejas, la máscara, las patas y la cola en color seal, lila, chocolate y azul.
• Los siameses pueden llegar a vivir 15 años o más.

Continuamos nuestro artículo sobre el gato Siamés, características de la raza hablando sobre sus orígenes.

Los gatos siameses proceden de Tailandia. En 1880, el rey de Siam regaló dos parejas de gatos siameses al cónsul general inglés en Bangkok; éste los llevó a su casa en Inglaterra, y se convirtieron en la comidilla de la ciudad. Su popularidad creció rápidamente, ya que la gente quería tener uno de estos hermosos gatos «orientales». El primer siamés que ganó un título de campeón fue Wankee en 1898, y la raza se desarrolló rápidamente a partir de entonces.

No está claro si los criadores de siameses siguieron a los jueces en las exposiciones oficiales de siameses o viceversa, pero por una u otra razón, el gato siamés fue adquiriendo un aspecto más delgado, con una cabeza más en forma de cuña. Esta raza moderna de siameses se parecía más a los gatos egipcios originales, tal y como los describe la historia.

En 1987, un grupo de criadores de siameses, angustiados por los cambios extremos en la apariencia de la raza moderna y preocupados por los posibles problemas de salud, se unieron para formar el Registro Internacional de Gatos Tradicionales y Clásicos. Uno de los objetivos de la organización era «recuperar y mantener el aspecto original de cada raza».

La gente suele confundir los términos «tradicional» y «clásico» en lo que se refiere a los gatos siameses. La fundadora de la Asociación del Gato Siamés Tradicional, Sheelagh Le Cocq, explica que el siamés clásico es una especie de cruce entre las versiones tradicional y moderna, sin los extremos de ninguna de ellas. Describe la época clásica como la comprendida entre 1945 y 1970.

El gato siamés también ha tenido representación en la gran pantalla. Famosas son películas como «Los Aristogatos«, «El viaje increíble» y «La dama y el vagabundo»

El gato siamés es inteligente y muy curioso. También es un gato muy activo y cuando no esté interesado en las cosas que usted haga por casa, estará entretenido colándose en algún rincón, explorando o haciendo alguna travesura inocente. Es un gato muy hablador, por lo que sabrá perfectamente cuándo el gato está despierto y activo.

Para mantener a su siamés entretenido y alejado de los problemas, proporciónele juguetes en forma de puzzle que le obliguen a pensar y moverse para liberar golosinas, utilice un «clicker» para enseñarle trucos, lance una pelota pequeña para que la traiga, coloque un comedero para pájaros en su ventana para que lo vea, o enséñele a caminar con correa y llévelo a pasear.

El siamés adora a las personas de todas las edades, incluidos los niños, y sólo pide que pase mucho tiempo con él, que le hable, que juegue con él y que, en general, lo mantenga entretenido. Le gusta ser el centro de atención, pero puede llevarse bien con perros y otros gatos. De hecho, es una buena idea tener un segundo siamés u otro animal que le haga compañía si usted va a estar fuera durante el día.

Todos los gatos tienen el potencial de desarrollar problemas de salud genéticos, al igual que todas las personas tienen el potencial de heredar una determinada enfermedad. Cualquier criador que afirme que su raza no tiene problemas genéticos o de salud está mintiendo o no tiene conocimientos sobre la raza. Huya de cualquier criador que no ofrezca una garantía de salud para los gatitos, que le diga que la raza es 100% saludable y no tiene problemas conocidos, o que le diga que sus gatitos están aislados de la parte principal de la casa por razones de salud.

Seguimos nuestra publicación sobre el gato Siamés, características de la raza explicando todo sobre su salud.

El gato siamés moderno, con su cabeza en forma de cuña, puede ser más propenso a los problemas respiratorios y dentales que los gatos con un tipo de cabeza menos extremo, y algunos siameses tienen ocasionalmente problemas de ojos cruzados o cola torcida. Otros problemas señalados en la raza son los cálculos en la vejiga, problemas oculares como el glaucoma y la atrofia progresiva de la retina, problemas cardíacos y ciertos tipos de cáncer.

Recuerde que, una vez que haya acogido a un nuevo gatito en su casa, tiene el poder de protegerlo de uno de los problemas de salud más comunes: la obesidad. Mantener a un siamés en un peso adecuado es una de las maneras más fáciles de proteger su salud general.

Si tienes interés por los gatos y otros animales, quizás tu vocación sea dedicarte a la sanidad veterinaria. Para ello nada mejor que estudiar un curso de auxiliar de veterinaria en uno de los centros acreditados por DQ. Disfrutarás de las mejores condiciones de acceso al mercado laboral, con reconocimiento a nivel internacional y las mejores facilidades para proseguir estudios universitarios.

El gato siamés tiene un pelaje corto que sólo necesita cuidados estándar. Cepille a su gato semanalmente para reducir el riesgo de bolas de pelo. Su distintivo patrón de puntos (color point) proviene de genes recesivos que hacen que se produzca el pigmento oscuro melatonina sólo en las zonas más frías de la piel. Por eso se ve el color más oscuro en las patas y las orejas, así como en la cara, donde la piel se enfría durante la respiración.

Las uñas de su gato pueden necesitar un recorte regular cada 10 o 14 días. Proporcione un rascador para salvar la tapicería y la carpintería. Preste atención a la higiene dental, inicie a su gato en el cepillado regular de los dientes a una edad temprana y programe limpiezas dentales periódicas por parte de un veterinario.

Los gatos siameses tienen una personalidad distintiva que es activa, juguetona y curiosa, pero también entrenable. Les gusta trepar y deben tener un rascador alto u otra estructura que les dé esta salida. También les gustan los rompecabezas y los juguetes para perseguir. No es conveniente que este gato se aburra cuando usted esté fuera de casa o podría volver y descubrir que ha hecho alguna travesura para entretenerse.

Los siameses son todo menos reservados con los humanos. Se vinculan a los humanos como lo hace un perro y le seguirán por toda la casa, buscando atención. Encontrará a su gato en su regazo en cuanto se siente. Quieren una interacción constante y se deprimen si se les deja solos durante mucho tiempo. Por lo tanto, es mejor que se encuentren en un hogar en el que usted esté en casa la mayor parte del día o que tenga algún amigo con el que jugar.

El siamés es una de las razas de gatos más ruidosas. Se dará cuenta de que conversará con usted a menudo, le regañará si no le presta atención y le hablará como si pudiera entender su idioma.

Los gatos siameses se adaptan bien a las familias con niños y a las razas de perros que son amigas de los gatos. Habrá que enseñar a los niños pequeños el trato adecuado con el gato para no provocar una respuesta defensiva por su parte.

Los gatos viven más tiempo si son gatos de interior. Así se evita la exposición a infecciones de otros animales y del entorno, así como a lesiones por peleas y accidentes. Un patio bien vallado puede mantener alejados a los depredadores, pero un siamés es probable que escale cualquier valla y se escape. La esterilización también será beneficiosa para cualquier mascota que no vaya a criar.

El gato siamés es un animal carnívoro y deben seguirse ciertas pautas de alimentación. Una vez destetados, los gatitos siameses deben recibir una dieta equilibrada. Siempre debe haber un cuenco de agua fresca junto a la comida, y ambos deben lavarse a diario para evitar problemas gastrointestinales.

Normalmente, comen alimento seco o comida para mascotas, y si se les da comida enlatada, debe estar a temperatura ambiente. Si el gato deja comida enlatada sin comer, hay que tirarla. Si el gatito siamés deja de comer durante un día, ponte en contacto con tu veterinario.

Aunque, como se ha mencionado anteriormente, el gato siamés es carnívoro, no debe comer carne o pescado crudos. Si se da, debe estar totalmente cocido. Del mismo modo, en lo que respecta a la comida enlatada, debe darse específica para gatos, nunca de perro u otro animal.

Los gatos siameses son animales muy fértiles. Los gatos siameses suelen alcanzar la madurez a los 6 meses y sus maullidos, cuando están en celo, son muy fuertes e insistentes. Aunque esta madurez sexual es tan temprana, no se les debe permitir aparearse hasta que tengan al menos 10 meses de edad.

Suelen parir camadas numerosas, con una media de 5 gatitos siameses, que suelen nacer fuertes y sanos. El gato siamés recién nacido tiene un pelaje casi totalmente blanco, excepto por unos pequeños toques de color en lo que más tarde serán las puntas coloreadas.

El siamés bebé tiene los ojos azules, aunque la intensidad definitiva típica de esta raza se adquiere alrededor de las 9 semanas de edad, y a medida que el siamés adulto crece, tiende a ganar peso, lo que provoca un aumento de la temperatura corporal y el oscurecimiento del pelaje. En cuanto a la vida media, muchos gatos siameses pueden vivir más de 15 años.

Si va a comprar un Siamés asegúrese de que procede de un criadero de confianza. Si no conoce ninguno, siempre puede buscarlos por internet en webs especializadas o acudir a un veterinario o asociación felina para que le recomiende alguno. Huya de sitios de compra/venta de segunda mano o webs no especializadas. Desconfíe si el precio es demasiado bajo para la media de esta raza.

También puede adoptar a su gato, aunque será mucho más difícil encontrar un Siamés en una protectora o refugio. Otra opción es preguntar a los criadores por gatos adultos con los que ya no esté interesado en criar.